Del empeño de todo Morón para "enamorar" y quedarse el rodaje de 'Cuando nadie nos ve' a notar los beneficios nada más arrancar

En 2019 se publicaba ‘Cuando nadie nos ve’ (Espasa), un novela escrita por Sergio Sarria ambientada en Morón de la Frontera. Cinco años después, toda una ciudad está volcada en el rodaje de aquella historia convertida ahora en una serie –creada por Daniel Corpas y escrita por un equipo de guionistas liderado por Arturo Ruiz, con la colaboración de José Antonio Valverde, Germán Aparicio e Isabel Sánchez–. La que será la primera producción de la nueva marca Max está dirigida por Enrique Urbizu, producida por Zeta Studios para Warner Bros. Discovery y ha llevado a las calles de esta localidad sevillana a actores como Maribel Verdú, Dani Rovira, Ben Temple, Austin Amelio y Mariela Garriga. Hace unos días en Kinótico visitamos el rodaje y pudimos hablar con el alcalde de Morón, Juan Manuel Rodríguez, y el jefe de localizaciones de Zeta, Rafa Caballero, sobre lo que supone esta experiencia para el municipio (y su comarca), su economía y su futuro. Por su parte, el autor de la historia original nos ha contado su conexión con Morón, por qué la eligió y la ilusión que le hace todo lo que ha supuesto aquella decisión para los vecinos.

Es un día caluroso de comienzos de abril y la Semana Santa ha vuelto a las calles moronesas. La diferencia entre la escena con La borriquita (en una de las imágenes que acompañan este reportaje) que contemplan periodistas y lugareños y la de hace unos días está en el clima (la de este año ha sido una Semana Santa lluviosa), pero también en que la que hoy toca no es real. Se trata de una de las escenas clave del arranque de ‘Cuando nadie nos ve’. El personaje al que da vida Maribel Verdú, la sargento de la Guardia Civil Lucía Gutiérrez, está en el palco de autoridades contemplando esta típica estampa de la Semana Santa moronesa cuando recibe una llamada que la obliga abandonar el acto religioso y acudir a atender una emergencia que, de alguna manera, la relacionará con la base americana situada a pocos kilómetros de la ciudad. Eso ya llegará, cada cosa a su tiempo.

Detrás de ese momento, que dura solo unos pocos segundos, hay mucho trabajo previo. Empezando por el del autor de la novela, Sergio Sarria, quien nos cuenta que su relación con Morón, donde la serie suma más de medio centenar de localizaciones, es antigua: "Empezó con lo musical”. Porque, como recuerda también el alcalde durante nuestra visita, la “base americana fue determinante en la aparición del ‘nuevo flamenco’ y el rock andaluz. Los militares estadounidenses destinados en Morón (como los de Rota) trajeron consigo música que en la España franquista era difícil de conseguir como discos de rock y blues, y fueron el germen de la contracultura en Sevilla”.